Llama la atención que la figura de Benito Pabón y Suárez de Urbina (Sevilla, 1895 – Panamá, 1954) apenas haya despertado el interés de la historiografía. Porque la apasionante vida de este militante de la CNT, abogado laboralista y político, bien merece ser escrita en forma de amplia biografía o de guión de cine: defensor de encausados por los sucesos de Casas Viejas y de la Revolución de Octubre; diputado sindicalista en Cortes tras las elecciones de febrero de 1936; organizador y miliciano de la columna rojinegra Águilas de la Libertad durante la guerra de España; Secretario general del Consejo de Defensa de Aragón; perseguido por agentes de Stalin a causa de su participación en el proceso contra el POUM tras los Hechos de Mayo de 1937; y un largo etcétera.
Natural de Villanueva del Río, era hijo del abogado Benito Pabón Galindo y María Teresa Suárez de Urbina Cañaveral. Junto con sus seis hermanas y tres hermanos conformaban una familia tradicionalista, a caballo entre el integrismo católico de El Siglo Futuro y el carlismo de El Correo Español, los dos periódicos que se leían en el hogar.
Estudió en el colegio de San Luis Gonzaga y comenzó el bachillerato con los jesuitas del Puerto de Santa María, pasando después al Instituto de Sevilla, donde en 1910 concluyó su formación secundaria. Empezó Derecho en Salamanca, regresando a Sevilla al año siguiente, donde se licenció en 1915.

Sensibilizado con los temas sociales y afincado en Granada, durante la Dictadura de Primo de Rivera ejerció como abogado laboralista y presidió el Comité Paritario de la Construcción. En algunos medios lo conocen como El Barriobero granadino, en alusión al gran letrado republicano Eduardo Barriobero.
En 1930 se afilió al Partido Radical Socialista y al año siguiente ingresó en la CNT. También trabajó en Zaragoza y en Madrid, acudiendo en general allá donde se le requiriera, a menudo defendiendo a trabajadores y campesinos de la CNT en tras huelgas y levantamientos: a los campesinos de Sevilla (mayo de 1932), a siete encausados por los sucesos de Casas Viejas (Cádiz, enero de 1933) o a más de un centenar de procesados en consejo de guerra por los hechos revolucionarios de Octubre acontecidos en Villaviciosa de Córdoba (1934), entre otros.
Otras veces profesión y militancia se confunden. Tal es el caso de su detención en Benalmádena (octubre de 1931) durante una huelga general convocada en Granada, a cuyos sindicatos en conflicto representaba[1]; de su encarcelamiento, un año después, por unas declaraciones hechas durante un mitin en Málaga, hecho que originó una protesta en forma de paro general durante 72 horas en Granada[2] que, finalmente, concluyó con su liberación; o, una vez más, de su reclusión en la Cárcel Provincial de Granada[3] (mayo de 1933).

También fue habitual encontrarlo en actos y mítines. En agosto de 1932 participó con Vicente Valero, Ballester y Miguel González, en el mitin nacional que la CNT realizó en Sevilla. Y en noviembre dio una conferencia en un local del Partido Social Revolucionario de Granada, titulada La juventud frente a la guerra imperialista[4]. Al cabo de un año intervino en un gran mitin anti electoral en la Monumental de Barcelona, organizado por la FAI y la Regional catalana de la CNT, junto a Germinal Esgleas, Valeriano Orobón Fernández, Josep Corbella, Domingo Germinal y Buenaventura Durruti. Y en abril de 1934 hizo lo propio en una concentración pro amnistía en el cine Europa de Madrid, adonde acudió como miembro de la Regional andaluza de la CNT.
En ocasiones se ha relacionado a Pabón con el treintismo, lo cual es más que dudoso; su nombre no aparece en ningún manifiesto del movimiento, ni tampoco como colaborador en su prensa —Cultura Libertaria, Sindicalismo-. Eulàlia Vega, autora de varios trabajos sobre el tema, sostiene que Pabón no participó de dicho movimiento[5]. Sí se sumará, como veremos más abajo, al proyecto del Partido Sindicalista (PS), algunos de cuyos afiliados procedían del treintismo y de los Sindicatos de Oposición de la CNT.
En mayo de 1935 habló en un mitin pro presos en el cine Europa de Madrid, en representación –según algunos diarios madrileños-[6] del partido Izquierda Radical Socialista. Y en noviembre acordó su intervención a un mitin de la Federación Nacional de Trabajadores de la Tierra (UGT) en Torrenueva (Ciudad Real), aunque al final no pudo asistir[7]. Burnett Bolloten lo relaciona con el Partido Republicano Federal de Eduardo Barriobero[8], lo cual no sería nada descabellado si tenemos en cuenta que pestañistas y federales actuaron conjuntamente durante la segunda mitad de 1935. Tanto fue así, que ambos partidos se plantearon su fusión, siendo desechada en votación del Pleno nacional del PS acontecido en enero 1936, que prefirió sumarse de forma independiente a la coalición del Frente Popular.
Sea como fuere, se presentó por Zaragoza capital en las listas del Frente Popular a las elecciones de febrero de 1936 como candidato independiente[9]. Según Ángel Mª de Lera, biógrafo de Ángel Pestaña y militante del PS, Pabón estaba afiliado a su partido en secreto[10]. Así, habría sustituido a Pestaña de la candidatura por Zaragoza tras entrevistarse con Juan Simeón Vidarte[11] (representante del PSOE en el Frente Popular) a fin de recabar el voto anarcosindicalista de la capital; si se hubiera conocido su militancia, o si se hubiera presentado Pestaña –menos popular que Pabón entre los confederales- es probable que no hubieran logrado representación.
La mayoría de autores que tratan el tema (César M. Lorenzo y Miguel Íñiguez, entre otros) dan por cierta su afiliación[12]. Unos pocos (Tuñón de Lara, Comín Colomer) sostienen, erróneamente, que el sevillano nunca perteneció al PS[13] . Y Bolloten, ahondando en lo dicho más arriba, afirma que aún se encontraba en las filas del Partido Republicano Federal cuando se presentó a las elecciones, ingresando después en el Partido Sindicalista.
Existen menciones en la prensa de la época y alusiones de políticos como Ángel Ossorio y Gallardo o Niceto Alcalá-Zamora que, en sus memorias, se refieren a Pabón como El Diputado anarquista. El propio candidato declaraba:
Mi ideario es un todo, conforme en lo que a finalidades se refiere, con el que propugna la CNT, a quien he dedicado, dedico y dedicaré mi máxima atención, esfuerzos y afecto. Pero entiendo que sin hacer dejación de estos principios, podré, en estos graves momentos, luchar con mayores ventajas por su consecuencia, sentado, con el mayor orgullo, entre el elemento proletario en un escaño del Parlamento… (“El Frente Popular en Aragón”; en Andalán, nº 445, 2ª quincena de febrero de 1986; p. 7)
A pesar de que desde las páginas de Solidaridad Obrera (8-2-1936; p.5) se criticara directamente la candidatura de Pabón y se promoviera oficialmente la abstención (v. titulares de Solidaridad Obrera de 17-12-1935; y 8 y 12-2-1936), en la Federación Local de Zaragoza –y también en la Regional asturiana, cada cual con sus particularidades- se mantuvo una actitud más laxa[14]. César M. Lorenzo llega a afirmar que su padre, el entonces Secretario del Comité nacional, Horacio M. Prieto, aseguró a Pabón que la CNT no se opondría a su candidatura en la capital aragonesa. Más adelante se arrepintió al saber que Benito Pabón se había afiliado de forma secreta al PS y no le perdonó nunca que no se lo hubiese dicho en ese momento; si hubiese conocido su afiliación no le hubiera dado su apoyo ya que no simpatizaba con Pestaña ni con su partido[15].
Si esto sucedía en el secretariado de la anarcosindical, para sus bases hay que tener en cuenta que una parte desobedecía las orientaciones anti electorales por intereses tácticos puntuales; por pertenecer a la CNT por consideraciones utilitarias y profesionales, sin asumir el anarquismo como ideal; o bien –en la línea del pestañismo- por creer que el activismo político y la intervención en la esfera institucional no incumbían a la CNT[16].
Todo ello puede explicar que Pabón fuera elegido diputado con 44.545 votos, quedando sólo por detrás de Mariano Joven Hernández (Izquierda Republicana). Tomó posesión del cargo en abril (credencial nº 19), sentándose en el escaño que había ocupado Miguel Maura durante la legislatura anterior. Curiosamente, su hermano Jesús revalidó en esos comicios su acta de diputado por la CEDA en Sevilla capital.
Como muestra de sus actuaciones parlamentarias anteriores a la guerra, se puede destacar:
- El 7 de abril intervino en la polémica discusión en torno a la destitución de Alcalá-Zamora como Presidente de la República. A pesar de conocer bien la Ley, fueron motivos ideológicos los que inclinaron su voto en favor de su cese:
Si hubiéramos tenido en cuenta las razones jurídicas que aquí se han dado, yo hubiera tenido que votar en contra de la proposición, pero precisamente porque se trata de destituir al Presidente de la República española, que en los dos años anteriores presidió una política contraria a todo aquello que es mi deseo ver implantado en España, sencillamente por eso y porque en esta votación se vienen abajo dos cosas: esa magistratura y el respeto al formulismo y a la letra de la Ley, porque obro en consecuencia de un ideal, he votado en favor de esta Proposición.”[17]
- El 15 de abril votó una moción de confianza en favor del Gobierno del Frente Popular y se manifestó contrario a los motines y la violencia por ser medios no válidos para lograr avances beneficiosos.[18]
- El 16 de junio acusó a Gil Robles y a Calvo Sotelo de defender los intereses de los responsables de mantener a 600.000 parados en tal situación, motivo suficiente para rebelarse contra el Estado y la sociedad que no les permitían vivir.[19]
- El 3 de julio de 1936 replicó a Ángel Galarza en relación con la Ley de Amnistía de presos político-sociales, argumentando contra la interpretación dada a la Ley de vagos y maleantes:
El concepto que se ha tenido en España respecto a la amnistía respondía a la realidad jurídica de no existir la Ley de Vagos y Maleantes, que es una pena en la realidad, porque las cosas son como son y no como las queramos llamar, y aunque nosotros nos empeñamos en decir que la prisión que están sufriendo estos declarados peligrosos sociales no es una pena, que vayan a preguntarles esto a ellos o a sus hijos si no constituye una verdadera pena y un castigo lo que están sufriendo en la realidad. Pero si no hubiera una razón jurídica para lo que pretendo habría una razón práctica: la de querer dar cumplimiento a una promesa de pacto electoral.”[20]
- En el ámbito provincial, el 20 de mayo pide al Ministro de Comunicaciones su arbitraje en la fábrica Carde y Escoriaza, dedicada a la reparación de material móvil de ferrocarriles. Ante la falta de trabajo y el consiguiente paro forzoso de sus obreros, Pabón solicita el traslado de coches de Correos a la capital aragonesa para su reparación.También interviene en favor de los damnificados por las inundaciones sufridas en la provincia de Zaragoza.

A finales de mayo de 1936, Pabón hizo gestiones para el Comité nacional de la CNT, constituido provisionalmente en Madrid tras su traslado desde Zaragoza, tratando y negociando con ministerios y el Gobierno del Frente Popular.[21]
Cuando se dio el golpe de Estado de julio de 1936, el diputado se encontraba en Madrid, donde realizó una importante labor en la reorganización jurídica de la capital en aquellos convulsos días. Además, junto con los diputados Mariano Joven y Eduardo Castillo, intentó conseguir armas para destinarlas a Zaragoza; pero el triunfo del golpe en la capital aragonesa no pudo pararse[22].
(Continuará)
Vía https://partidosindicalista.wordpress.com/
Interesante personaje del que no tenía conocimiento.
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En mi investigación de tesis doctoral, aparece con cierta frecuencia, no solo como abogado, sino como militante, siendo uno de los oradores habituales, junto a Francisco Maroto, José Alcántara, Zarco y Francisco Crespo. La visita que hace Montseny a Granada, que coincide con la Sanjurjada, que fue fuerte en Granada y hubo combates y muertes, se le describe como alguien generoso, comprometido, inteligente y muy culto. Montseny se quedó en la casa de Francisco Crespo, y conoció a mucha gente, entre ellos a Maroto y a los que murieron en esos días: Donato y Cañete (padre). Pudo conocer a muchos de ellos porque asistió a un Pleno Local celebrado poco antes del golpe donde hubo un debate entre anarquistas y posibilistas. Montseny asegura que hubo mucho respeto entre ambas partes, mientras que Maroto o Crespo eran parte del sector libertario, Pabón estuvo entre los posibilistas. Del que no hay que confundirse: los posibilistas se sentían también anarquistas.
Durante la Sanjurjada se le señaló, junto a Maroto, como los promotores de la resistencia anarquista contra el golpe militar; los desórdenes públicos preocupaba más a las autoridades que unos militares tomando el país.
En el entierro de Donato y Cañete, los dos cenetistas que murieron durante la Sanjurjada, hablaron Francisco Maroto del Ojo, Federica Montseny y Benito Pabón.
Pabón por ejemplo estuvo en el mitin que se realizó en Motril, organizado por gente de la UGT que se estaba replanteando su estrategia, y llamaron a la CNT. Viajaron a la costa Maroto, Crespo y Pabón. Aunque hubo alguna resistencia de los dirigentes socialistas, al final hablaron, animados por las masas de trabajadores que acudieron. Tuvo tanto éxito que se afiliaron en bloque, la UGT prácticamente quedó desaparecida, salvo por sus dirigentes más activos, y con polémica, porque hasta el alcalde, un persojanazo, Narciso González Cervera, simpatizó, sin abandonar el socialismo más radical, con el anarcosindicalismo. Antes de ese mitin la CNT solo contaba con un sindicato de carpinteros de unos 200 integrantes. Tras aquello entraron unas tres mil personas, según se afirma.
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Gracias por ampliar la información, Fran
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Cuándo fue el mitin de Motril que citas, Fran?
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Reblogueó esto en PARTIDO SINDICALISTA.
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